En efecto, en las democracias en que la ley gobierna, no hay demagogos, ... Los demagogos sólo aparecen allí donde la ley ha perdido la soberanía... Tan pronto como el pueblo es monarca, pretende obrar como tal, porque sacude el yugo de la ley y se hace déspota, y desde entonces los aduladores del pueblo tienen un gran partido.
Volver al incio
|
1 comentario:
Gracias.Ya lo tengo apuntado como lectura recomendable...
Publicar un comentario